23 de Noviembre de 2024

Niños dejan sus estudios

 

Para Mauricio Jiménez Mejía, de 15 años, el no tener padres ha sido difícil, más aún porque hace cuatro meses sufrió la pérdida de su abuelo el conocido revistero, don Abad Jiménez, por lo que ahora sólo tiene de apoyo a su abuelita “Doña Leova”.

Ángel de 13 años de edad, mencionó que en su caso perdió el año escolar por causas ajenas a su persona y por eso decidió ir a una tienda a trabajar como empacador, no obstante confía que el próximo año pueda entrar a la secundaria, “cuando entre le voy a echar ganas, porque está muy difícil” aseguró el menor.

Luis Ángel que tiene 15 años de edad, narró que perdió el semestre por un accidente que sufrió, pero él tiene el firme propósito de volver a la escuela y prepararse bien, pues sabe que aunque pida trabajo en una gasolinera o de barrendero le pedirán los estudios básicos, ya que a él le solicitaron tener bachillerato.

Por otra parte mencionaron, que ellos conocen a más menores con circunstancias parecidas, sin embargo, les recomiendan que “sería mejor retomar los estudios, porque está difícil para la economía, ya que ahora todo está más caro”.

Estos infantes o adolescentes se dan cuenta de lo precario de la situación, porque a pesar de que es más fácil conseguir entrar como empacador, una vez que rebasen los 16 años no podrán seguir ahí, ya que es el tope que les marcan en las tiendas.

 

Otros más trabajan en el mercado con sus padres y tienen la esperanza de que si mantienen los estudios podrán cambiar su destino, tendrán mejores oportunidades y habrán de sacar adelante a su familia.