Explicó que a los 22 años, recién concluida la Segunda Guerra Mundial, se fueron a trabajar once tuxpeños con la compañía J Heinz, en el condado de Elk Rapids en el Estado de Míchigan, pues en esta época era más fácil entrar a los Estados Unidos e incluso vivir en el extranjero, como una forma más de trabajar y obtener un pago mejor.
Al tener un contrato de seis meses, aunque trabajó ocho y después regresó a México, las autoridades federales estadounidenses les descontaban el pago de la Seguridad Social, por lo que hace tres años estos montos fueron entregados al gobierno mexicano, el cual mantuvo silencio un par de años hasta que algunos ex braceros de otros estados se dieron cuenta, de esta forma pudieron pedir esta remuneración a los sobrevivientes y familiares, la cual equivale de 40 mil a 70 mil pesos.
Añadió que en aquellos años trabajó en la limpia y deshoje del betabel, en el pisque del betabel y pepino, en la pisca del durazno, manzana y cereza, por lo que si recibe este pago, será un aliciente para su propio sustento, aunque se dijo sorprendido de que a pesar de los años les entreguen estos montos. Por el momento continuara con la entrega de requisitos, a fin de que se le haga justicia y pueda reclamar esta remuneración fruto de su trabajo en 1948.
Cabe señalar, que existen diversos casos de ex braceros en el Estado, que desde octubre pasado aun no recibían este pago a causa de no cumplir los requisitos pedidos por la SEGOB, a pesar de que esta situación se remonta al año 2005, cuando se inició la entrega de recursos.
