Tras renunciar a la Diputación, Miguel Martín lanzó una serie de descalificativos hacía el partido que le llevó al poder, asegurando que él nunca perteneció al PAN, ya que el mismo partido rechazó su solicitud como miembro adherente, y además responsabilizó a este Instituto Político de obstaculizar su trabajo como legislador, así como de lucrar con los Programas de Gobierno Federal e intimidar a los beneficiarios de dichos programas para beneficio de quienes se encontraban como títeres de este partido político y de su directiva.
Otro punto menos a su favor es que en numerosas ocasiones hizo evidente sus lazos con Pancho, a quien procuraba “dar juego públicamente cada que podía”.
Antes de que se quedara sin fueron legislativo por la licencia solicitada para separarse de su cargo de diputado, corrió una versión periodística de que habría tramitado un amparo ante la justicia federal contra cualquier acto de la PGR, corporación policíaca o instituto armado de la Federación.
Y es que afirman que ahora que ha manifestado su interés por obtener nuevamente la candidatura, en su afán de cobrar fuerza, ha querido extorsionar a las altas esferas políticas, cuando por todos es sabido que al gobernador, su ex compañero de curul en la LXI Legislatura Federal, lo descalificó el 9 de diciembre de 2009 desde la tribuna de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión en un candente debate propiciado por la cercana disputa de la gubernatura de Veracruz.
Miguel Martín, quien por esas fechas estaba convencido de que con Yunes Linares Veracruz tenía la oportunidad histórica de transitar hacia la democracia y el PAN de lograr la alternancia en el Gobierno, se le fue a la yugular a Javier Duarte, acusando al legislador cordobés de hacer anticipadamente precampaña por la gubernatura en todo el Estado a bordo de aeronaves oficiales.
Y por si fuera poco, en el 2009 el Director General del Proyecto de Acuacultura de Juana Moza, Anibal Vladimir Dinorín Guerra, presentó denuncia en contra de Miguel Martín López, por presuntos delitos de robo, allanamiento y lo que resultara, a raíz de ellos sufrió amenazas por parte del asistente de Martín López quien ni si quiera para amedrentar le dio la cara luego de timarlo.
Es así que desde tiempo atrás quiso de nueva cuenta través, ahora del PRI, llegar a ser un funcionario de alto nivel, sin lograr su cometido. Por todo lo anterior, es que afirman que ese interés por encontrar de nueva cuenta una mina de oro que lo ayude a resolver sus problemas no prosperará, pues aunque quiere brillar y hacerse notar llevando regalos a instituciones o donando material, de nada servirá porque él sólo vive para servirse del erario público y lo poco que logró hacer como funcionario público no le alcanza para “llegar otra vez”.
