Julián Vázquez, vecino de la Fraccionamiento Petrópolis, expresó que “es incómodo pasar por esta carretera, pues los camiones urbanos y taxis se desvían para evitar los baches, convirtiéndose en un peligro el cruzar de un lado a otro”.
Son varias zonas las que presentan grandes hoyos y daño en el asfalto, además de que algunas personas piden cooperación por tapar estos huecos, aprovechando que la carpeta asfáltica ha sido afectada por el paso de vehículos pesados la mayor parte del día.
Hace un año, durante el banderazo de inicio de la rehabilitación del Libramiento, se mencionó que serían 100 millones de pesos los destinados para rehabilitar los cuatro kilómetros de longitud con concreto hidráulico, a fin de soportar el paso de camiones de carga, y obviamente no resultó ser así.