12 de Mayo de 2024

EL PRESUNTO VCIOLADOR DE MORENA

RAÚL RODRÍGUEZ CORTÉS

La mujer, con identidad reservada para su protección con las iniciales JDG, volvió en sí sobresaltada. Yacía en una cama con la ropa desordenada, un intenso dolor de cabeza y la sensación de que un líquido le escurría por la vagina. Era el 20 de mayo de 2016.

Félix Salgado Macedonio, era en esos tiempos director de un periódico de Guerrero, estado del que ha sido diputado federal, senador, alcalde de Acapulco y ahora candidato a gobernador por las siglas de Morena, si los resultados de su polémica designación –vía encuestas- libran las impugnaciones interpuestas ante instancias partidistas, por dos de sus contrincantes.

Félix había conocido a JDG en enero de 2014 en el centro comercial Gran Plaza Acapulco. Ella tenía ahí un stand de la fundación “Casita de los Perros”, organización altruista dedicada a la protección de animales domésticos abandonados. Él se acercó para ofrecerle promoción gratuita. Después la contrató para el periódico que dirigía.

Empezaron así las insinuaciones y el acoso, según declara ella en la carpeta de investigación 12030270100002020117 abierta por la Fiscalía de Guerrero.

De acuerdo con ese documento, Félix la mandó llamar a la dirección del rotativo el 19 de mayo de 2016 para decirle que tenía “unos gatitos y perritos” que donar, y que la esperaba para entregárselos al día siguiente en un domicilio del Fraccionamiento Las Playas, donde estaría con amigos y familiares. JDG llegó puntual, a las diez de la mañana. Solo estaba una empleada de nombre Paty “N” quien le pidió esperara unos minutos. Le ofreció un refresco que bebió confiada. Empezó a sentirse muy mareada. La habían narcotizado.

Cuando JDG volvió en sí, Félix estaba con ella en la cama de un cuarto de la segunda planta. Ella le recriminó lo ocurrido y, muy asustada salió corriendo del domicilio. Horas más tarde la contactó telefónicamente para decirle que fuera al periódico a recoger la bolsa que había dejado. Ella le dijo que no y colgó. Inmediatamente después recibió por WhatsApp una fotografía donde aparecía en su cama totalmente desnuda. Alarmada llegó a la oficina donde Félix le mostró más fotografías y videos de la violación. La citó para el día siguiente en su domicilio, bajo el chantaje de que si no iba haría llegar los videos a su esposo y los subiría a las redes sociales. Temerosa de la amenaza acudió a la cita.

Quiso forzarla a tener sexo, a lo que se negó. Entonces le propinó una golpiza.

El cinco de julio de aquel 2016, en la oficina del periódico, Félix la forzó a tener sexo, ahora con la amenaza de volver a golpearla si se negaba. La violó por segunda vez. Ella le dijo que lo demandaría, pero él le respondió que más le valdría no meterse con alguien tan poderoso. El primero de octubre de ese mismo año, Félix ordenó que ya no se le permitiera la entrada al periódico.

La denuncia de estos hechos fue presentada ante la Fiscalía de Guerrero el dos de enero de 2017.JDG reconoce que fue un error no haber demandado antes. Le tomó siete meses confesárselo a su esposo, quien por cierto tiene parentesco con el gobernador Héctor Astudillo y se sumó como abogado en la asesoría jurídica del caso.

La carpeta de investigación contiene los videos y las fotografías usadas para el chantaje, otras más de las lesiones ocasionadas por las golpizas, un audio que ella grabó con las amenazas de él y dos estudios clínicos de junio de 2016 que confirmaron el contagio de una enfermedad de transmisión sexual. La acusación contra Félix es por violación, abusos deshonestos, hostigamiento sexual y amenazas.

El entonces fiscal de Guerrero, Xavier Olea Peláez asegura que la investigación quedó perfectamente integrada y con evidencia más que suficiente para ser judicializada, pero revela que no lo fue, porque recibió la instrucción de no seguir con el caso por tratarse de quien se trataba. El expediente quedó en la reserva. Pero la acusación aún puede ser judicializada a petición de la denunciante. Quién sabe si JDG quiera hacerlo, porque hace dos años tuvo que abandonar Acapulco por amenazas directas de muerte de su presunto violador.