Agencias
México
Es importante poner atención a sus actitudes para poder ayudarlo
Para que un perro esté sano y feliz necesita desarrollarse en un ambiente libre de situaciones estresantes, de lo contrario nuestro lomito comenzar a desarrollar comportamientos agresivos, empezará a gruñir y a ladrar constantemente sin provocación alguna e incluso puede sufrir consecuencias de salud como un ataque cardiaco.
El estrés es una respuesta que el cuerpo del animal emite en caso de que se encuentre constantemente con situaciones que lo alteren y en caso de que esto suceda, es muy importante observar qué es lo que le esta causando este sentimiento para poder ayudarlo, pues alguna de nuestras acciones de la vida cotidiana podría estarle causando este padecimiento y no nos hemos percatado.
¿Cómo saber cuando mi perro está estresado?
Uno de los primeros síntomas que notarás cuando tu perro está estresado es que no se comportará como comúnmente lo hace, su forma de socializar cambiará, puede estar ladrando más de lo normal o podría estar haciendo nuevos sonidos, su lenguaje corporal hablará por sí solo, únicamente hay que poner atención en ello para poder darle apoyo.
¿Cuáles son los síntomas de un perro estresado?
Es muy fácil identificar cuando nuestros perritos están experimentando situaciones de estrés, pues al no poder hablar, su cuerpo hace lo necesario para mostrar lo que le está ocurriendo. En términos generales, cuando esto sucede habrá cambios muy notorios en su carácter y en sus hábitos que anteriormente no eran parte de ellos.
Situaciones como separase de sus dueños, ruidos fuertes como cohetes, coches o motos, viajes en auto, cambio de casa, cambio de rutina o hábitos, disminución de paseos o falta de socialización, son algunas de las acciones que propician el estrés en nuestros cachorros.
- Hiperactividad
- Movimientos o conductas repetitivas
- Jadeo frecuente
- Miedos
- Rascado excesivo
- Mirada caída
- Pérdida de pelo
- Evasión corporal
- No obede
- Rigidez muscular
- Poca o nula energía
¿Cómo ayudarle a mi perro a reducir su estrés?
Una vez que ya identificaste alguno o varios de estos comportamientos en tu mascota, es de vital importancia que le brindes los cuidados que necesita para que sus niveles de estrés reduzcan y comience a ser el perro que antes era, es ideal ser paciente ya que también podemos contagiarle nuestro estrés y entonces el proceso será lento. Sin embargo, en caso de que notemos que la situación está fuera de nuestro control o es algo mucho más grave lo mejor es acudir con un veterinario para que lo evalúe.
Para poder ayudarlo debemos acariciarlo constantemente y mostrarle nuestro afecto, darle masajes, jugar con él, sacarlo a pasear una o dos veces al día, evitar ruidos fuertes o que lo alteren, brindarle un espacio tranquilo donde pueda jugar o recostarse. Es indispensable que no esté amarrado ni que pase muchas horas bajo la lluvia o el sol, además es fundamental que siempre tenga agua a su alcance y mantenga una dieta saludable.
Información tomada de El Heraldo de México