-Seleccionados sólo tendrán que asomarse enfrente de su hotel
AGENCIA
Es normal que la luz de día haga que Kazán amanezca a las tres de la madrugada en esta época en que por muy pocas horas oscurece. También normal, ver innumerables carteles con la foto de Javier Hernández, abrazando a Tecatito en la celebración de un gol.
Será Cristiano Ronaldo la figura mundialmente más atractiva con la que Kazán inaugure la Copa Confederaciones el próximo domingo, pero son sin duda las imágenes de la Selección Mexicana las que predominan en esta ciudad con toque de cuento.
Los seleccionados solo tendrán que asomarse enfrente de su hotel, ya vigilado por una decena de policías, para encontrarse con el Kremlin de esta ciudad, el ícono histórico de la República de Tartaristán, patrimonio de la humanidad desde el 2000 y a pocos kilómetros de la Arena Kazán, donde el domingo el Tri y Portugal cortarán el listón de su actividad del Grupo A.
Paradas de autobuses con la mencionada imagen de Chicharito y el ausente Corona intentan animar a una ciudadanía que difícilmente se distingue entusiasmada por la Copa y el Mundial del año que viene. Y no por un tema de carácter sino por complicaciones de idioma.
