30 de Septiembre de 2024

Inicia fiesta grande de la Huasteca

* Celebraciones religiosas, étnicas y agrícolas se conjugan cada 29 de septiembre rumbo al Día de Muertos

REDACCIÓN

CHONTLA

En casa del maestro Luis Antonio Neri Domínguez, en la comunidad Tének de San Francisco, este jueves doña Acasia Neri y la abuelita Eleuteria de la Cruz Santiago desde muy temprano se levantaron a "raspar" el pipián, con el fin de preparar unos ricos tamales con camarón para la ofrenda.

Esto lo hacen cada 29 de septiembre, que en la cosmogonía étnica es cuando se abren las puertas del cielo para que los difuntos lleguen a tiempo a las festividades de Santorum ó Día de Muertos, pero que, a decir de la promotora cultural Eloísa Hernández Mateos, no tiene nada que ver con la conmemoración religiosa de San Miguel Arcángel, aunque por coincidencia de fechas se le relaciona.

Este día, los huastecos arreglan su altar y ponen velas como símbolo de luz que guiará a las almas a que lleguen a sus casas en la fiesta de Día de Muertos. Es decir, sólo se cree que se abren las puertas del cielo, para que lleguen a tiempo más no significa que los difuntos ya estén aquí, explica Hernández Mateos.

El 29 de septiembre (Día del Maíz) se realiza también un ritual en las milpas, para que se sigan cuidando las cosechas, y una ofrenda tradicional por el fin del ciclo agrícola. Los que han sembrado invitan a la familia o vecinos a  la milpa, donde se cortan los elotes más grandes y se ponen en una cruz de chaca, que se coloca en una esquina de la milpa para resguardarla de ciclones o malos aires, cómo lo relata don Petronilo Ponce, residente de la comunidad de La Esperanza Santa Clara, municipio de Tantoyuca.

Un día antes, Luis Antonio Neri Domínguez ha purificado los animales, la fruta y todos los elementos con los que se prepara la ofrenda, conjuntando la celebración con la ceremonia ritual a Dhipak, el espíritu del maíz, y agradece a la madre tierra por la buena cosecha, porque se cumple un ciclo agrícola de buen cultivo. "Es el inicio de la fiesta grande de la Huasteca, expresó el promotor cultural Santiago Pérez Gómez, de la localidad de Amatlán, municipio de Naranjos-Amatlán.