De acuerdo a los inconformes, prácticamente durante todo el día la unidad permaneció estacionada sobre la avenida Justo Sierra, frente a la Escuela Primaria del mismo nombre, con un exhibidor desplegado sobre la acera, con aparatos electrodomésticos que ofrecían a los docentes.
El automotor, destacaron, fue aparcado frente al acceso principal de estudiantes e incluso en horario de recreo utilizaron el auditorio público para realizar su actividad comercial, afectando directamente a los menores que comúnmente juegan e ingieren sus alimentos en ese lugar.
Sin embargo, el descontento mayor fue por la obstrucción que se registró sobre la banqueta, lo que obligó a los peatones a transitar por el arroyo de circulación de la arteria. “No estamos en contra de la actividad comercial, sólo pedimos que no afecten a terceros”, expresó una madre de familia del plantel.