La Delegación sigue acéfala, su titular no se presenta
MARIO HERRERA ROCHA
Naranjos
A pesar de contar con una jurisdicción que comprende siete municipios y un extenso territorio, la Delegación número 29 de Tránsito carece de elementos y vehículos suficientes para cubrir su encomienda al 100 por ciento, aunado a la falta de un titular que esté al pendiente de sus requerimientos.
Aparte del Jefe de Servicios Operativos, José Guadalupe Cruz Cruz, la corporación únicamente posee dos elementos de crucero, que por obvias razones no se dan abasto para mantener un ordenamiento adecuado, de ahí que la vialidad esté convertida en un verdadero caos, sin semáforos, con una señalética deficiente y con una Delegación a la deriva.
Al frente de la corporación se encuentra Osiel Cruz García, quien la semana pasada únicamente asistió a su oficina el lunes, pues de ahí en adelante no se dignó acudir, de ahí que la dependencia esté de cabeza, pues a pesar del destacable trabajo que realizan Guadalupe Cruz y el personal administrativo, no existe un timonel que mantenga el barco a flote.
Como se recordará, el sábado 18 de abril arribó a esta ciudad quien sería el nuevo delegado de Tránsito, Vicente Poixtan Fernández, pero a pesar de presentar un nombramiento firmado por el Director de Tránsito del Estado, Edmundo Martínez Zaleta, no pudo tomar posesión debido a que Osiel Cruz movió sus influencias.
Incluso Cruz García armó un teatro con taxistas, camioneros y hasta gente del Regidor Gandhi Chávez Salinas, que con pancartas apoyaban su permanencia; sin embargo, una vez que logró su cometido, solamente se ha sentado una vez ante su escritorio, por lo que la Delegación número 29 de Tránsito está abandonada y más bien luce como un edificio “fantasma”.