Actualmente, Jesús Pérez Vázquez lleva las riendas de la dependencia, la cual cuenta con alrededor de ocho mil 500 usuarios, quienes aportan en pagos el dinero suficiente para contar con una distribución eficiente y dejar de sufrir por la falta del preciado elemento.
La construcción de una represa es otro tema pendiente, pues mientras se espera la anhelada edificación de la presa que alimentará a todos los municipios de la zona, bien se pudiera hacer frente a las temporadas de estiaje con un vaso de captación en forma y no con retenidas de grava que se lleva la corriente.
Lo anterior, sin contar que una vez que el suministro se restablece después de una llovizna, lo que llega a las viviendas es agua-lodo, que arrastra hasta caracoles que causan que los filtros de los medidores domésticos se taponeen, mientras la población sufre las consecuencias.