-Vecinos no se preocupan por darle mantenimiento
Por Mario Herrera Rocha
Sucio, deteriorado y sin el más mínimo asomo de lo que un día fue, luce el Ex Campo de Empleados de Pemex, otrora exclusiva zona en la que se asentaron el Club Petrolero, un parque infantil, máquinas antiguas a manera de monumentos, una biblioteca y su “Ateneo” (que aún perdura como Centro de Integración Familiar).
Ahí radicaban en su mayoría trabajadores de confianza de Pemex que llevaban una vida tipo “americano”, en vistosas casas de madera construidas al estilo de las compañías expropiadas en 1938, denominadas “camillas”.
Sin embargo dicho sector fue desincorporado de Pemex y vendido a los mismos sobrevivientes de aquella zona “VIP” de antaño, quienes las habitan ya como propiedad privada, pero que no se han preocupado por darle a la colonia el mantenimiento adecuado, por lo que su aspecto es deplorable.
