-Atayde, Fuentes Gasca, Chino de Pequín y Unión han cerrado sus puertas
Por Mario Herrera Rocha
Sólo cuatro circos en todo el país están amparados para presentar funciones con animales silvestres en cautiverio, expresó Emilio Canto Ruíz, propietario de Big Circus, instalado en los terrenos de la Expo-Feria, quien mostró el resolutivo sobre el Juicio de Amparo Indirecto 612/2015 por él promovido, dictado por el Juez 11º. De Distrito del Estado de Veracruz, Jorge Arturo Porras Gutiérrez, con sede en Poza Rica.
Lamentó que la Ley General de Vida Silvestre, publicada el 8 de julio de 2015, haya generado la muerte de gran número de ejemplares que quedaron a la deriva, la pérdida de miles de empleos y la decadencia de importantes empresas circenses como Atayde, Fuentes Gasca, Circo Chino de Pekín y Unión, entre otros que han bajado sus carpas de manera definitiva.
Aseveró que la legislación “no es pareja”, ya que afecta a un sólo sector al no prohibir, por ejemplo, corridas de toros y peleas de gallo. “Nosotros damos un trato digno a los tigres, dromedarios, cebrunos, ponis y changos; cada especie tiene su plan de trabajo y se cumple al pie de la letra”, afirmó Canto Ruíz mientras acariciaba a dos rumiantes.
“Son cinco circos los que conforman la empresa y todos han resentido esta situación; nosotros teníamos 130 trabajadores y ahora únicamente tenemos 80, en tanto el más grande bajó de 200 a 170”, explicó el empresario originario de Mérida, Yucatán, quien cuenta con una reserva de fauna cerca de Potrero del Llano, municipio de Álamo, donde concentra a varios de sus animales.
