9 de Octubre de 2024

Perdura la tradición

-Encendieron velas en el Día del Niño Perdido para guiar su camino

DE LA REDACCIÓN

Miles de luces fueron encendidas en esta ciudad el pasado miércoles por la noche, como parte de la tradición del Día del Niño Perdido, que como muchas otras ha trascendido su origen religioso para convertirse en una tradición popular que cada siete de diciembre niños y adultos ponen en práctica.

Nacida en Tuxpan, de donde se ha extendido a Naranjos, Cerro Azul, Álamo y Poza Rica, entre otras poblaciones, la costumbre consiste en recordar el evangelio bíblico de Lucas (2:39-52) e iluminar el camino del Mesías con velas que se colocan en las banquetas.

Según el pasaje, el pequeño Jesús de 12 años de edad viaja con sus padres a Jerusalén para las fiestas de Pascua, pero ellos lo pierden de vista; después de tres días, José y María lo encuentran en el templo de la ciudad, conversando con los maestros judíos.