-Desde hace mes y medio que renunció al cargo Rogelio Rivero Chong
-La zona es atendida directamente desde el Centro INAH Veracruz
Por ÉDGAR ESCAMILLA
La Zona de Monumentos Arqueológicos El Tajín se encuentra catalogada como Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO, y está incluida en el Registro Internacional de Bienes Culturales bajo Protección Especial; pese a ello, desde hace un mes y medio, la oficina de la dirección de la zona se encuentra acéfala, luego de la renuncia de Rogelio Rivero Chong, lo que ha provocado un mayor atraso a los programas de mantenimiento, al grado de que los diversos problemas son manejados directamente por el Delegado del Centro INAH Veracruz, Esteban Rodríguez Flores.
Tal y como se denunció en mayo de este año, la zona arqueológica, orgullo de Veracruz, se encuentra con graves problemas de maleza por la falta de personal de mantenimiento; a la fecha persisten daños provocados por plagas de insectos que han socavado bajo las piedras de las pirámides, y los drenes siguen sin funcionar adecuadamente.
Otro de los graves problemas que afectan al centro ceremonial y que pondría en riesgo el edificio de los murales, es que la palapa construida para la protección de los mismos, presenta un vencimiento en su estructura, además de que la falta de conservación de la palma con que fue confeccionada, está ocasionando la acumulación de una especie de polvo que comienza a cubrir los murales.
Fue precisamente desde mayo de este año, cuando Rivero Chong dejó de presentarse a laborar en la zona arqueológica, por lo que el INAH le solicitó su renuncia, misma que se hizo efectiva el 15 de agosto, sin que hasta la fecha se haya cubierto la plaza, por lo que todo asunto relacionado con El Tajín, es operado directamente desde el Puerto de Veracruz.
Será hasta el ocho y nueve de octubre cuando se lleve a cabo una mesa de trabajo en la ciudad de Cuernavaca, Morelos, cuando se aborde la problemática especial que está presentando El Tajín, entre ella la falta de maquinaria, equipos e insumos para el mantenimiento de la zona, así como la exigencia de contratación de al menos 18 plazas para custodia. También serán tomadas en cuenta el resto de las zonas arqueológicas de Veracruz.