- Se espera ayuda extranjera de Francia, Italia y Grecia
AGENCIAS
PORTUGAL
"¡Tuvimos tanto miedo!", relata con lágrimas en los ojos Maria Ribeiro, una jubilada residente en Albergaria-a-Velha, una localidad de Portugal amenazada por los vastos incendios forestales que han dejado siete muertos y que arrasaron cerca de 10 mil hectáreas.
Portugal movilizó más de 3 mil 700 bomberos el martes, después de que el lunes pidiera ayuda a otros países europeos para controlar los incendios que destruyeron en tres días más superficie que todos los siniestros registrados durante el verano boreal, según datos de protección civil.
El comandante nacional de protección civil, André Fernandes, actualizó este martes a siete el balance de fallecidos.
"Lamentamos la muerte de tres bomberos", dos mujeres y un hombre, atrapados por las llamas mientras luchaban contra un incendio cerca de Nelas, en la región de Viseu, en el norte.
Un brasileño de 28 años que trabajaba en una empresa forestal en Albergaria-a-Velha, en la región de Aveiro, murió el lunes.
Otras dos personas fallecieron tras sufrir crisis cardíacas y un bombero voluntario que luchaba contra los incendios cerca de Oliveira de Azeméis murió el domingo repentinamente durante un descanso de las labores para combatir las llamas.
Los incendios de mayor envergadura golpearon la región de Aveiro y fueron especialmente destructivos en aldeas cercanas al municipio de Albergaria-a-Velha.
En todo el país, hay cerca de 50 focos activos y cerca de mil vehículos movilizados y una veintena de aviones y helicópteros.
Desde que las autoridades pidieran ayuda de los países del entorno, dos Canadair enviados por España se sumaron a dispositivo y durante la jornada se espera la llegada de aparatos de Francia, Italia y Grecia.