-La próxima semana se conocerá el derrotero de la presidenta suspendida de Brasil
AGENCIA
El Senado de Brasil inició las deliberaciones sobre si debe quitar del cargo permanentemente a la Presidenta Dilma Rousseff, el paso final en una batalla política que paraliza al Congreso y ensombrece al país que padece una profunda recesión.
La primera mujer Presidenta de Brasil está acusada de mover ilegalmente fondos entre presupuestos del Gobierno para ocultar déficits. Los detractores dicen que ella lo hizo para fortalecer su respaldo y argumentan que esas maniobras profundizaron la crisis en la mayor economía de Latinoamérica.
Rousseff niega haber cometido violaciones y dice que sus enemigos, incluyendo la élite del país que se queja de la presencia de su Partido de los Trabajadores (PT) en el poder en los últimos 13 años, están conduciendo un Golpe de Estado.
El proceso hacia el juicio político comenzó el año pasado, cuando Eduardo Cunha, entonces presidente de la Cámara de Diputados y viejo rival de Rousseff, presentó la medida. En abril, su Cámara la aprobó por mayoría abrumadora. En mayo, el Senado votó 55-22 para impugnar y suspender a Rousseff por 180 días.