19 de Abril de 2024

Lamenta asesinato de niño actor

*Ilse Salas lo despide con emotivo mensaje

Agencias

Ciudad de México

La muerte violenta de Fernando Xavier de Casta, compañero laboral de Ilse Salas en la película "Plaza Catedral" de próximo estreno, no es un caso atípico en el cine internacional.

El panameño De Casta fue también bailarín y futbolista, de acuerdo con la actriz mexicana, pero alguien que le enseñó a como no actuar.

En la cinta ella interpreta a una mujer que ha cortado su vida matrimonial y de pronto se topa con un niño de 14 años, que lastimado llega a su casa.

“Por qué tengo que reaccionar como dice aquí, si como me lo dices no me provoca eso” y “no te creí”, eran las frases que Ilse recibía del joven durante el rodaje.

“Nos toca hacer algo con la violencia que azota a nuestros países”, escribió Ilse en su cuenta de instagram, sin abundar en detalles sobre el fallecimiento del actor.

Con emotivo mensaje se despidió de él, y acompañó sus palabras con una serie de fotografías y un video en el que Fernando aparece bailando.

"Pero para sacudirse el dolor, la impotencia y la rabia queda honrar la vida. Honrar la vida de nuestro hermoso “Chief”, decir su nombre, invitarles a conocerlo y recordarlo. Fernando Xavier de Casta. Fue bailarín, futbolista y actor sobresaliente. Brillante y gracioso, muy brillante y muy gracioso. A mí me enseñó a NO actuar, a bailar y a entender el panameño".

De acuerdo con la cadena Univisión, De Casta fue asesinado a tiros este jueves en el distrito de San Miguelito, Panamá.

EN COLOMBIA

En 1998, un actor del filme colombiano "La vendedora de rosas" deslumbró a todo mundo: Giovanni Quiroz.

El joven de Medellín, de entonces 20 años y quien se dedicaba a la delincuencia, había sido reclutado por el realizador Víctor Gaviria para contar esta adaptación de "La pequeña cerillera", de Hans Christian Andersen, pero ambientada en los barrios pobres y violentos del pais sudamericano.

Su rostro y presencia en el set al interpretar a “El Zarco” le valieron invitaciones de España para convertirse en actor real y otros trabajos que le ayudaran a escapar de la delincuencia.

Quiroz no aceptó ninguna de las oportunidades y siguió con su vida normal hasta el 2000, cuando, similar al destino de su personaje, fue acribillado por razones no esclarecidas. Su cuerpo encontrado a la orilla de un río.

“Uno ser joven y vivir aquí en Medellín es muy duro. Duro como un hijueputa. La voz de mando la tiene más que todo el joven, aquí en Medellín, que es el más entrompador”, contó el actor natural en uno de los detrás de cámaras de la película.

“Yo no lo niego, yo soy un ladrón, yo he robado mucho aquí”, narró en otro momento, asegurando además que consumía drogas.

Gaviria, el realizador de la cinta, reveló que durante el rodaje Quiroz fue protagonista de varios problemas en set.

Un día llegó a la filmación un grupo queriendo matarlo, porque supuestamente una noche antes, el joven había apuñalado a un hombre.

El director de cine narró que una tarde, durante el rodaje, llegaron a matar al Zarco porque, al parecer, él le había pegado una puñalada a un pelado la noche anterior.

“Recuerdo que había unos cordones que aislaban el set y no dejaban pasar a los sicarios. Fui hasta donde el Zarco y le dije que tenía que irse. “¡Estos hijueputas! Yo me voy a hacer matar entonces, Víctor”, me dijo. Y salió corriendo”, contó Gaviria.

 CON LA MARA

Uno a uno los protagonistas del documental "La vida loca", de Christian Poveda, aparecían muertos en pantalla.

El realizador había estado por más de un año siguiendo a integrantes de la Mara, una de las bandas criminales salvadoreñas más violentas, para conocer su vida real.

Si en una escena se veía a una joven feliz, hablando de lo que deseaba en la vida y porque iba a tener un ojo artificial nuevo, minutos después su cuerpo era mostrado inerte.

El documental causó conmoción en los festivales de San Sebastián 2008 y La Habana por la crudeza de su contenido. Poveda estaba orgulloso de lo conseguido y quería seguir retratando casos así.

Casi un año después, en una visita a El Salvador donde decía había logrado amistades entre los Maras, fue asesinado presuntamente por integrantes de ese grupo, aunque hay quien dice que fueron otras personas las victimari