- Sector enfrenta serios desafíos económicos
Iris Román
Tuxpan
La cooperativa Barra de Corazones, conformada por 45 socios dedicados a la pesca en altamar, enfrenta serios desafíos económicos que dificultan la recuperación de la producción de escama y tiburón, así como otras especies. Entre las principales necesidades del gremio están los subsidios para gasolina y apoyos para la adquisición de motores, lanchas y redes, según explicó Hugo Rogelio Hernández Islas, representante de la cooperativa.
Hernández Islas también mencionó que las actividades pesqueras se han visto afectadas por la contaminación y la presencia de gasoductos, lo que ha obligado a las especies a migrar más lejos, incrementando los costos operativos de las cooperativas.
Ante esta situación, los pescadores están solicitando que se reactive el subsidio a los combustibles, el cual fue retirado hace seis años. Confían en que la gobernadora Rocío Nahle pueda atender esta demanda y brindarles el apoyo necesario para mejorar sus condiciones de trabajo.
Los pescadores están planteando propuestas concretas para solicitar apoyo al gobierno estatal. Según Hernández Islas, aunque el gobierno anterior no priorizó al sector pesquero, el actual gobierno parece mostrar mayor disposición para atender sus necesidades.
La cooperativa referida produce entre 4 y 10 toneladas de pescado al mes, dependiendo de la temporada. Durante el invierno, la producción es más alta, mientras que en verano tiende a disminuir. Los productos son comercializados principalmente en la Ciudad de México, en la Central de Abasto, sin restricciones significativas gracias a que cumplen con los permisos necesarios.