ESTAS FIESTAS RECREAN EL PEREGRINAJE DE JOSÉ Y MARÍA EN BUSCA DE UN LUGAR DONDE PUDIERA NACER EL NIÑO JESÚS.
Desde una perspectiva social, las posadas son mucho más que una tradición religiosa: son un ritual que une a las comunidades. En un país como México, donde las relaciones familiares y comunitarias son fundamentales, estas celebraciones refuerzan los lazos sociales y fomentan la colaboración. Compartir tamales, atole y dulces no es solo una muestra de generosidad, sino un recordatorio de que en tiempos difíciles siempre podemos contar con los demás.
Además, la posada se adapta a cada comunidad. En algunos lugares se celebra con un carácter más religioso, mientras que en otros es un evento social donde lo importante es convivir. Este sincretismo refleja cómo los mexicanos han hecho suya esta tradición, integrando elementos como el papel picado, las luces y las piñatas.
¿Qué son las posadas?
Las posadas son representaciones simbólicas del peregrinaje de María y José en busca de alojamiento antes del nacimiento de Jesús.
Estas celebraciones incluyen una mezcla de actos religiosos, actividades comunitarias o en familia y festividades que han evolucionado para incorporar elementos de México.
¿Cuándo inician y terminan?
De acuerdo con la tradición católica, la primera posada se lleva a cabo el 16 de diciembre, un día que da inicio a una de las celebraciones más esperadas del año. En 2024, esta fecha caerá en lunes, marcando el comienzo de nueve días de posadas que culminarán en la Nochebuena, el 24 de diciembre.
A continuación, te compartimos el calendario completo de las posadas navideñas de este año: Lunes 16 de diciembre, Martes 17 de diciembre, Miércoles 18 de diciembre, Jueves 19 de diciembre, Viernes 20 de diciembre, Sábado 21 de diciembre, Domingo 22 de diciembre, Lunes 23 de diciembre y Martes 24 de diciembre.
Anteriormente, en las posadas se realizaban las “misas de aguinaldo”, donde había representaciones alusivas al “Mesías”, que hoy en día se conocen como pastorelas.
¿Por qué se realizan?
Se realizan para conmemorar el viaje de María y José a Belén, lugar donde nació Jesús, y su búsqueda de un lugar para hospedarse.
Durante estos eventos, se recrea esta búsqueda mediante un acto conocido como “la petición de posada”, en la que los participantes, divididos en dos grupos, entonan los tradicionales villancicos.
En un inicio tenían un enfoque religioso, pero hoy también cumplen un papel social y cultural, reuniendo a las familias y comunidades en un ambiente de reflexión, convivencia y celebración.
Actualmente, las posadas suelen combinar elementos tradicionales con prácticas modernas, manteniendo su esencia como una festividad de unión y alegría.
El Origen de las Posadas
Las posadas tienen raíces que se remontan al siglo XVI, cuando los misioneros españoles llegaron a América. Su objetivo era evangelizar a los pueblos indígenas y, para hacerlo, usaron una mezcla de religión y tradiciones locales. Inspirados en las “misas de aguinaldo” que se celebraban en España, los frailes adaptaron esta práctica, añadiendo elementos teatrales, música y procesiones para enseñar a las comunidades indígenas sobre el nacimiento de Jesús.
La tradición de “pedir posada” simboliza el viaje de María y José y la búsqueda de refugio. En cada casa, los peregrinos cantan villancicos para pedir albergue, y los anfitriones responden, siguiendo un diálogo que culmina en una fiesta con comida, piñatas y ponche. Este acto no solo es una recreación religiosa, sino también una expresión de valores como la hospitalidad, la solidaridad y el amor al prójimo.