25 de Abril de 2025

Dejan abandonados unos mil vehículos

-Buena parte de éstos son propiedad de trabajadores en activo y jubilados de PEMEX

Por Édgar Escamilla

De acuerdo a un censo realizado por la comisión en Tránsito y Vialidad municipal, en la ciudad existen hasta más de mil vehículos “chatarra” abandonados en las calles, muchos de ellos son propiedad de trabajadores activos y jubilados de Petróleos Mexicanos (PEMEX), quienes los conservan para poder cobrar las prestaciones en gasolina.

Francisco Jorge Cázares Echeverría, Regidor comisionado en el ramo, informó que el estudio reveló la existencia de poco más de mil vehículos abandonados en la vía pública; sin embargo, no existe un espacio para confinarlos como se establece en el reglamento de Tránsito.

Antes del último cambio en la Delegación Regional de la Dirección General de Tránsito y Seguridad Vial, se había acordado la realización de operativos para el retiro de estas unidades, las que representan un riesgo para la población, por lo que tras el nombramiento del nuevo titular, Héctor Tablilla Colorado, se retomará dicha solicitud.

A decir del Edil, buena parte de los vehículos que fueron detectados durante el censo, son propiedad de trabajadores en activo y jubilados de PEMEX, quienes los conservan para seguir cobrando la prestación en gasolina que les entrega la empresa productiva del Estado.

En el resto de los casos se dificulta la identificación del propietario, por lo que es competencia de Tránsito del Estado proceder a su retiro.

En mayo pasado, el Cabildo de Poza Rica determinó la necesidad de retirar estas unidades de la vía pública, que además de dar una mala imagen a la ciudad, sirven de guarida a fauna nociva y son utilizados como tiraderos de basura. 

A la fecha, son ya ocho cambios en la Delegación Regional de la DGTSV en lo que va de la Administración, comentó el Edil, lo que ha dificultado la implementación de ciertos programas, como el de reparación del sistema de semaforización de la ciudad o los operativos a inmediaciones de los planteles escolares, donde los padres de familia se estacionan en doble y hasta triple fila para esperar a sus hijos.