Aprovechar la economía digital y la juventud de México
ENRIQUE DE LA MADRID
Un mexicano con 2 a 5 años de experiencia en tecnologías de la información gana entre 20 y 40 mil pesos al mes, pero este salario se cuadruplica si tiene un buen nivel de inglés. Esto es bastante más que los 7 mil pesos mensuales que gana en promedio un mexicano.
Esto me lo platicó Emmanuel Olvera, quien dirige una empresa que ayuda a quien busca empleo en la industria de la tecnología. También me platicó que en el último año se duplicaron las vacantes porque hay muy poquitos egresados de las universidades con estas habilidades. Las empresas no encuentran el talento que necesitan.
Ante la falta de trabajadores con estas habilidades, los empresarios están contratando a jóvenes de preparatoria siempre y cuando cuenten con estos conocimientos básicos y ya luego son capacitados por estas empresas.
Muchas de estas empresas están dispuestas a mejorar sus prestaciones, con vacaciones ilimitadas, trabajo remoto y más flexible, que es lo que están buscando los jóvenes de hoy.
Emmanuel me dijo que varias compañías estadounidenses están viniendo a México a crear sus equipos de tecnología, como Lyft o Stripe. Son empresas que ofrecen salarios muy altos.
México se les hace un país atractivo porque está lleno de jóvenes, por ejemplo, la edad mediana en México es de 29 años mientras que en Estados Unidos y China es de 38 años, en Austria y Grecia es de 45 años, en Alemania y Japón está cerca de los 50 años.
Son los jóvenes quienes mejor entienden la economía digital, el desarrollo de software, de videojuegos, el marketing digital y quienes más atraídos están por esta nueva economía.
No obstante, muchos jóvenes mexicanos experimentan la frustración de estudiar muy duro durante muchos años, para salir de la universidad y no encontrar buenas oportunidades laborales.
Esto sucede especialmente en sociedades donde sus empresas, sus centros de capacitación y escuelas no logran mantenerse actualizados ante los rápidos cambios de la economía global.
Aprendamos de casos de éxito, donde los sistemas educativos están diseñados específicamente para que los alumnos encuentren un trabajo con salario alto acabando la escuela, como en Estonia, donde con una menor inversión a la que hacen muchos otros países, tienen el segundo lugar a nivel mundial en la prueba PISA, el examen que evalúa las capacidades de todos los estudiantes; y Estonia tiene una tasa de creación de empresas seis veces superior de la Unión Europea.
Hay que conectar la preparación y la educación de nuestros jóvenes ahí dónde están las mejores oportunidades laborales y esto se logra con una mayor coordinación entre empresas, gobierno, academia y sociedad civil, para que la educación vuelva a ser la mejor herramienta para prosperar en la vida y así emparejarnos.