El respaldo del presidente Andrés Manuel López Obrador a Claudia Sheinbaum, sustentado económicamente a través de la Secretaría del Bienestar y políticamente con la operación de gobernadores morenistas, se ha hecho patente también mediante otras instancias gubernamentales que le han transferido cerca de mil millones de pesos al Gobierno de la Ciudad de México vía la sustitución de servicios de seguridad privada y vigilancia.
Específicamente son 979.5 millones de pesos los que las secretarías de Estado, institutos públicos, comisiones autónomas y demás organismos que manejan dinero público le entregaron en contratos al gobierno de Sheinbaum este año, antes de su renuncia para competir en el proceso interno de Morena.
Entre los principales clientes del servicio de vigilancia que hoy en día debe otorgar la administración de Martí Batres se encuentran la Secretaría de Cultura, de Alejandra Frausto; la Secretaría del Bienestar, de Ariadna Montiel; y la Secretaría de Energía, a cargo de Rocío Nahle. Estas tres funcionarias son del círculo más cercano a Andrés Manuel López Obrador y han mostrado su respaldo a Sheinbaum en sus aspiraciones de ser la candidata de la 4T en 2024 y pelear por la Presidencia de la República.
Entre los contratantes de los servicios policiacos también figuran la SSC, el ISSSTE, a cargo de Pedro Zenteno; el Instituto Nacional de Migración, de Francisco Garduño, y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, que encabeza el vicealmirante en retiro Carlos Velázquez Tiscareño. En los últimos dos casos resulta extraña la presencia de los policías capitalinos en estaciones y ubicaciones estratégicas que se encuentran resguardadas por la Guardia Nacional y por efectivos de la Marina.
Completan la lista de organismos vigilados por los efectivos policiacos de la CDMX el Instituto Mexicano del Petróleo, el Instituto de Cancerología, el Instituto Nacional de Antropología e Historia, el Instituto Mexicano de Medicina Genómica, el Instituto Mexicano del Petróleo, el Instituto Nacional de Salud Pública, el Instituto Nacional de Ciencias Penales, el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias, el Archivo General de la Nación, la Agencia de Seguridad, Energía y Ambiente y la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el retiro, entre otros.
En el primer semestre de 2023 la cifra que el Gobierno de la CDMX logró captar por los servicios de vigilancia de sus cuerpos policiacos fue apenas 5% del presupuesto que le destina a su Secretaría de Seguridad Ciudadana, por lo que no resulta crucial para su funcionamiento, pero aún así llama la atención que las transferencias multimillonarias se concretaron previo al lanzamiento de Sheinbaum como “corcholata” estelar y la que más apoyos ha recibido.
Este esquema también ha sido aplicado por la Comisión Federal de Electricidad, a cargo de Manuel Bartlett, la cual ha optado por la contratación de seguridad privada para su infraestructura estratégica en estados que gobiernan los partidos de oposición, pero en aquellas entidades en las que gobierna Morena contrata a la policía local para otorgarle a esos gobiernos adjudicaciones millonarias. En esa lista de estados beneficiados se encuentran algunos con graves problemas de inseguridad y violencia como Guerrero, Michoacán, Oaxaca y Veracruz.