El agua es uno de los ejes centrales de nuestra propuesta de gobierno. No sólo como una promesa de campaña, sino como un derecho inalienable y exigible de todos los ciudadanos, sin importar dónde vivan dentro de nuestra metrópoli. El agua debe unir a la Ciudad, no dividirla.
La sequía que enfrentamos, agravada por el cambio climático, es un reflejo de una crisis global que requiere soluciones a largo plazo adecuadas a cada realidad local. Mi propuesta no sólo identifica los problemas acuciantes que enfrentamos en materia de agua, sino que también plantea soluciones concretas, sensatas y, sobre todo, inclusivas.
Es importante recalcar que el tema de la escasez del agua es un problema nacional y que por ello debemos enfrentar el problema de manera coordinada y con un pensamiento a largo plazo. El calentamiento global es una de las amenazas más importantes para la humanidad y las ciudades deben tomar acciones contundentes para ser catalizadores del cambio positivo. Nosotros vamos a construir una Ciudad limpia, responsable con el medio ambiente y consciente de los grandes desafíos medioambientales que estamos padeciendo, resistente y resiliente frente al cambio climático.
En ese sentido, mi compromiso se traduce en acciones tangibles con una visión amplia y a corto, mediano y largo plazo mediante una política de Estado y un gran acuerdo metro y megalopolitano que implica, entre otros, la inversión de miles de millones de pesos en infraestructura hídrica para poder renovar el sistema hídrico de la Ciudad, dar el mantenimiento necesario para aprovechar los recursos que tenemos y alcanzar cero desperdicios.
Garantizaremos el acceso al agua para toda la Ciudad sin importar en qué colonia vivas. Hemos preparado un programa amplio con expertos para obtener 20 metros cúbicos adicionales de agua por segundo; el programa incluye la rehabilitación de 11 fuentes de abastecimiento, la ampliación del almacenamiento de agua de lluvia, la recuperación de mantos acuíferos, atención en menos de 24 horas a las fugas de agua, cero desperdicios y el programa Sed Cero: Puntos de hidratación gratuitos y bebederos.
En la Ciudad de México a nadie le va a faltar agua.
Hay que recordar que esta Ciudad era una ciudad de agua y por eso vamos a emprender acciones y obras para recuperar la ciudad lacustre. Buscaremos regenerar mantos acuíferos y humedales. Vamos a construir el sistema de captación de lluvia más grande del país, y lo haremos en toda la Ciudad. También rehabilitaremos el Sistema Lerma y haremos la sustitución de kilómetros de líneas de agua, para prevenir futuras crisis.
Lo más importante es tener una visión metropolitana que reconozca que el desafío del agua trasciende los límites municipales. La idea de “humedecer el subsuelo” y la protección de áreas naturales como el Bosque del Agua son parte de esta visión integral.
Mi propuesta es un llamado a la acción colectiva, tanto del gobierno como de la ciudadanía. En un momento en que algunos proponen privatizar el agua, yo defiendo un modelo de “agua del bienestar”, donde el agua sea un derecho fundamental y no una mercancía. Esta visión inclusiva y participativa busca involucrar a toda la sociedad en la solución de este problema crítico, promoviendo un modelo humano y sostenible de gestión del agua.
Es evidente que la corrupción del Cártel Inmobiliario que ha generado una demanda insostenible por el agua a través de la construcción ilegal ha contribuido a nuestra crisis hídrica. Por eso, no toleraremos este tipo de actos de corrupción. Nosotros proponemos un enfoque integral que incluya la inversión en infraestructura, la innovación en la gestión del agua y la participación ciudadana. Nuestra propuesta representa una visión del agua como un derecho humano para todas y todos con participación ciudadana y contralorías sociales.