11 de Mayo de 2024

-El amoniaco y la independencia alimentaria

Por Julio César Vega Olivares

La idea de desarrollar la petroquímica en Pemex partió de un elemento muy importante  en ese momento de la historia del país, que era  la idea de producir  fertilizantes nacionales  a bajo precio en vías de cimentar nuestra  independencia alimentaria,  para ello se planeó y se construyó una serie de plantas de amoniaco, en Camargo, Chihuahua, y en Salamanca, Guanajuato; el denominado complejo petroquímico Cosoleacaque, que sería el centro amoniaquero más grande de Latinoamérica, comenzó con dos plantas y después construyó cinco mas y de mayor producción, además de una de Acrilonitrilo y otra de Paraxilenos.

El amoniaco es un producto que permite aumentar la producción agrícola, y desde el punto de vista estratégico garantizar la seguridad alimentaria del país, lo cual no es cualquier cosa.

La producción de amoniaco es verdaderamente importante, pues es la base de la producción de fertilizantes; es producir comida.

El mismo amoniaco es un poderoso fertilizante, de igual manera lo son sus derivados como la urea, el sulfato de amonio y el nitrato de amonio. Para que  veamos la importancia del amoniaco, tan sólo en el 2004 el 83 por ciento del amoniaco producido industrialmente se usaba como base de fertilizantes agrícolas; en la actualidad, el uso de fertilizantes es indispensable  debido a la baja fertilidad de los suelos y para obtener los altos rendimientos y la calidad de los cultivos  que se requieren.

También el amoniaco se utiliza para darles digestividad al rastrojo, o paja de cereales, aumentando su valor nutritivo; este proceso se denomina método noruego y permite aprovechar el rastrojo de mejor manera, disminuyendo el costo de alimentación del ganado.

A partir del amoniaco, es factible fabricar toda una cadena de fertilizantes como el sulfato de amonio, el nitrato de amonio  y la urea, y me parece que esa es la idea del Presidente Enrique Peña Nieto, impulsar nuevamente nuestra independencia alimentaria, integrar la cadena del amoniaco, dejar de importar fertilizantes y producir los propios, para ello por disposición expresa del Ejecutivo Nacional; se ha creado el 31 de julio de 2015 una subsidiaria de Pemex denominada “Pemex fertilizantes”, con la finalidad de producir, distribuir y comercializar amoniaco y fertilizantes.

Por razones supuestamente económicas y de racionalidad productiva, habíamos dejado de producir amoniaco, cerrando algunas de las plantas de Cosolecaque, así como las de Salamanca y Camargo, Chihuahua, la cual estuvo fuera de operación desde el 2003; esta planta se había pensado ponerla a producir nuevamente; sin embargo, en el año 2014 no reportó producción, pues algunas fueron cerradas parcialmente, otras temporalmente y otras definitivamente, todo esto para importar amoniaco y fertilizantes que parece un negocio redondo de funcionarios venales, es decir, nuevamente la corrupción torpedea la línea de flotación de Pemex y del país. En 1992 el complejo Cosoleacaque producía dos millones 287 mil toneladas de amoniaco; sin embargo, en 2013 se detuvo la operación del citado complejo. Ya en 1997 se alegaba que el alto costo del gas hacía muy cara la producción de amoniaco y no se podía competir contra los precios externos y que era más barato importar el amoniaco mientras el gas se quemaba en los flares de la sonda de Campeche.

Pero ahora parece que el Presidente, con una visión nacionalista,  está decidido a acabar con esa cadena de corrupción que somete al campo mexicano a precios excesivos y a depender del extranjero, es decir, con las cuatro plantas que quedan, de siete que habían, todavía se pueden producir cerca de dos millones de toneladas anuales que corresponden al 30 por ciento de los requerimientos nacionales, todo esto es resultado de no mantener una planeación estratégica sobre los requerimientos del país y de que hemos dejado que se pudra Pemex a propósito, para dejar entrar el capital extranjero y hacer negocios incluso transexenales, mientras el campo  sin sus insumos necesarios para producir no logra cubrir las necesidades internas, y seguimos con una fuerte dependencia alimentaria. 

El campo necesita de Pemex y Pemex necesita cirugía profunda y sacar todo el pus que lo mantiene en estado de coma.