Por Nancy Jácome
Últimamente he estado compartiendo el pan y el vino con algunos músicos, pintores y amantes de la danza, entre otros, y todos o casi todos coinciden en que faltan más espacios culturales y muchos recuerdan con nostalgia los llamados “domingos culturales” en los que participaban con gusto.
Tal vez es cierto el dicho de “nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde”, y en el caso de quienes gustan del arte en Tuxpan, parece que la frase queda como “anillo al dedo”, pues hoy en día, cada uno de los artistas buscan por su parte poner su granito de arena y marcar la diferencia.
Y es que lo cierto es que no hay que rascar mucho en Tuxpan para encontrar a quienes aman y practican las diversas formas del arte. Tal vez sea el momento de que las autoridades volteen a ver que al pueblo no hay que traerle grandes artistas para distraerlo, sino que hay que ponerle un escenario, porque ellos solitos saben hacerlo.
Desde el grupo de “Danzoneros”, quienes tienen que pelear por sus espacios todos los domingos, pues cuando llega la feria o hay eventos son desplazados, hasta el dibujante que sólo le permiten dibujar en el parque los sábados y domingos después de las 6:00 de la tarde.
Los cantantes arman sus propios recitales; plaza cristal, con su pésima acústica, se ha convertido en el escenario que nadie les da. Hace falta cultura en Tuxpan y hace falta promoción de cultura también, pero tal vez no falte tanto talento como creemos, pues ahí encerrados en casas particulares están los cuadros de aquellos que han aprendido a pintar un lienzo, pero por pena o por falta de motivación, no se han atrevido a presentarlos en exhibiciones al pueblo.
Ahí escribiendo en cuadernos y redes sociales, hay quienes no encuentran el tiempo para promocionar sus trabajos; tuxpeños que tienen sangre para escribir poesía, tuxpeños que tienen chispa para ver un Puerto diferente, para describir las costumbres de la gente y tuxpeños que tienen la osadía de retratar un tuxpan diferente.
Si los pintores han encontrado poco a poco en las nuevas instalaciones de Casa de Cultura un refugio, no deja de hacer falta un escenario donde el cantante pueda entonar la melodía, donde el violinista pueda hacer vibrar su violín, donde el rockero haga estallar corazones, donde el danzonero ponga el ejemplo de un buen baile para que la gente pueda disfrutar la danza. Un lugar reservado en la agenda de los tuxpeños como antes lo fueron los domingos culturales que hoy muchos extrañan.
Y todos los artistas concuerdan en que hace falta un escenario en Tuxpan y más interés de sus funcionarios por promocionar la cultura.
