Oriundo de Poza Rica y residente en Tuxpan, García Elías reiteró que únicamente desea poder trabajar, junto con otros compañeros, “ofreciendo esa medicina económica que es la risoterapia”, a través de malabares, adivinanzas, acrobacias y magia cómicas, chistes y sketches, caracterizados con su vestuario y zapatones, nariz y guantes de payasos.
Añadió que tienen esposa e hijos que mantener y pagan talleres de actualización artística, por lo cual requieren que les permitan trabajar en espacios públicos, a cambio de cooperaciones voluntarias del público, bajo la supervisión de la autoridad, para que comprueben, dijo, “que nuestro lenguaje y actuaciones son correctos”, así como su calidad artística, moral y humana.
