24 de Septiembre de 2024

Jornada de convivencia

 

Explicaron los entrenadores que la convivencia acuática es muy importante porque “la gente cambia en el agua, adquiere confianza, es un miedo menos”, siendo un logro para las personas que tienen discapacidad poder añadir esa fortaleza a su vida. En el caso de los niños autistas, que no son capaces de comunicarse con sus semejantes, al ejercitarse en el agua les cambia la expresión, se comportan de otra manera, interactúan, juegan, se relajan, porque “entrar al agua es como retornar al vientre materno”, aseveraron.

 

Aparte de la convivencia, la actividad sirvió como inducción a la natación para quienes no habían practicado esa actividad, y como ciclo de afloje para quienes participan en competencias paralímpicas, previo a las competencias que se realizarán en el mes de julio, en el Puerto de Veracruz, de manera que puedan tener un mejor desempeño en sus respectivas especialidades deportivas, ya que mediante la actividad en el agua, sus músculos quedan relajados para la siguiente etapa de entrenamiento.