Alberto Martínez Bonilla, habitante de esta localidad, comentó que al terminar los estudios de Primaria, los adolescentes salen a la ciudad para continuar con la Secundaria y el Bachillerato, y lamentablemente son pocos los que regresan a su lugar de origen por falta de oportunidades, dado que en esta zona al campesino no le pagan bien sus cosechas, y ni los apoyos de programas federales o estatales llegan a sus manos.
En esta comunidad existe un alto índice de profesionistas, en comparación con otras comunidades, donde los jóvenes adultos se dedican también a otras actividades; los habitantes adultos se están quedando solos, pues los jóvenes al concluir sus estudios profesionales radican en otros lugares a fin de tener una mejor forma de vida y poder sostenerse, pues como campesinos sólo reciben de 120 a 150 pesos.
En los Altos de San Lorenzo existen 52 familias, equivalentes a 152 habitantes, un bajo número si se compara a los 220 que viven fuera, los cuales acuden a ver a sus familiares únicamente en fiestas de fin de año o vacaciones.
Los pobladores, que en su mayoría son pequeños ganaderos, mencionaron que a pesar de que muchos jóvenes profesionistas emigran, siempre existirá alguien que labore en los trabajos de la ganadería cuando regrese al pueblo.
Actualmente son 19 niños los que cursan desde el Jardín de Niños a sexto de Primaria, y cuando concluyan pensarán en moverse, disminuyendo a los integrantes de las familias, por tal motivo es posible que esta comunidad con el tiempo se convierta en un pueblo fantasma.
JOVENES COMUNIDAD 1
Pocos niños quedan en el Alto de San Lorenzo.
JOVENES COMUNIDAD 2
La comunidad tiene una taza alta de profesionistas, pero la mayor parte de ellos viven en otras ciudades.
JOVENES COMUNIDAD 3
Alberto Martínez Bonilla, habitante de Altos de San Lorenzo.
NUMERAL
220 personas viven fuera del Alto de San Lorenzo, superando las más de 150 habitantes que aún habitan allí.
19 niños cursan el nivel básico desde Jardín de Niños a Primaria.
