25 de Noviembre de 2024

¿Invertimos?

YHERALDO MARTÍNEZ

Hay una fiebre en redes sociales sobre las inversiones, aunque eso solo es una pequeña muestra de la vida misma, parece un tema ya bastante popularizado, no es nuevo, pero definitivamente si muy sobreexplotado en la actualidad. Tal vez es ese capitalismo que nos incita a invertir y forjar ese sueño en nosotros sobre la independencia económica. Por supuesto es que eso no es malo, lo malo es tergiversar ese mensaje y no buscar hacerlo de manera correcta.

Esto de las inversiones ha desencadenado un sin fin de gurús de los negocios, infinidad de master class para que este tema no esté tan alejado de la gran mayoría de la gente y de esa manera todos aspiremos a esos niveles de vida. Cualquiera te puede señalar un determinado lugar, pero pocos son los que realmente pueden enseñarte cómo llegar a él. Nunca será un error pretender aprender sobre inversiones, capital, finanzas, como hacer que nuestro dinero se multiplique, únicamente que hay que saber con quién hacerlo y en quién confiamos.

Definitivamente, en los últimos años, nos debió de haber quedado claro que no hay nada seguro en esta vida, debido a que todo mantiene un factor de riesgo. Sin embargo, considero que hay una inversión que potencializa todas las demás, y esa es la inversión en el SER, tenemos que ser conscientes que ningún éxito en el hacer, sustituye los vacíos del SER.

Hay una buena diversificación de inversiones que podemos realizar en nosotros mismos, una de ellas, es nuestra salud física, hay que gastar en una buena revisión médica cada cierto periodo de tiempo, para prevenir enfermedades o poder detectarlas a tiempo, aprendamos a ser preventivos y no correctivos. Alimentarnos correctamente, y unas buenas rutinas de ejercicios para mantenernos saludables, serán siempre una muy buena forma de invertir.

No debemos de olvidar nuestra salud mental y emocional, e invertir también en un buen terapeuta o psicólogo que nos ayude con ello. Recuerda que cuando poseemos heridas, andamos salpicando a personas que nada tienen que ver con esas lesiones nuestras. Como luego dicen, no es quien nos la hizo, sino quien nos la paga y tampoco se vale.

Busquemos invertir en nuestra mente, cultivemos nuestro cerebro, mantengámoslo sano, aprendiendo cosas nuevas, nunca es tarde para inscribirnos en ese curso que tanto hemos querido durante mucho tiempo. Por supuesto, dormir bien, mente sana ayuda a un cuerpo sano. Sin olvidar, nuestro aspecto espiritual, también, una vez leí, algo que me dejó impactado y, ya que estamos en confianza, te lo comparto con mucho cariño y respeto: “se necesitan 5 minutos al día de rodillas, hablándole a quien o en lo que tú creas, para mantenerte todo el día de pie”.

Hay quien piensa que este tipo de inversiones no nos brinda ganancias palpables, el detalle es que la plenitud y una buena calidad de vida no se puede medir por cuentas bancarias, o cantidad de objetos materiales. No invertir en lo anteriormente mencionado, si nos trae como consecuencias, amistades insanas, relaciones tóxicas, ambientes no adecuados de convivencia. En la salud está comprobado que no manejar adecuadamente nuestras emociones nos acarrea padecimientos que empiezan como malestares y pueden terminar en enfermedades terminales.

No podemos solo intentar vivir produciendo, vuelvo a recalcar, no solo se trata de hacer sino del SER. La falta de equilibrio en la persona no nos dejará sostener nuestras ganancias, y muchas veces lo mucho que se acumula con el paso de los años y el esfuerzo, se va en una bola de nieve de patologías que terminan con todo lo que hemos ganado. Por ello es mejor invertir ahora en nosotros, tal vez por ello está escrito “amaras a tu prójimo como a ti mismo”, la calidad de tus relaciones de cualquier índole que hay afuera es directamente proporcional con la calidad de relación que tenemos con nosotros mismos.

¿Cómo ves, le invertimos? Éntrale se obtienen buenas ganancias.