18 de Mayo de 2024

Por Nancy Jácome 

Dos veces fui a ver la película “Día de la Independencia”, y es que la verdad fui por el actor y por los sorprendentes efectos visuales, porque de extraterrestres no ofrece mucho más. En 20 años, los humanos han mejorado sus armas con la tecnología alienígena, pero siguen sin saber mucho de ellos, sólo cuentan con los restos de lo que quedó y no hay ningún estudio que vaya más allá de la Vía Láctea.

Un churro muy bien actuado, con mucho material visual para las damas y con una línea histórica decente. Pero aun con todo el despliegue de tecnología, nunca podrá superar el impacto inicial que generó hace más de 126 años “La Guerra de los Mundos”, de Herbert George Wells.

Aprovechando que los extraterrestres volvieron a estar de moda, es necesario recordar este libro que sin duda es el padre del género.

Durante la época en que fue escrito, muchos pensaban que ya se había descubierto todo lo que debía ser descubierto, pues la Revolución Industrial se había consolidado y en el mundo existía una gran desigualdad social.

Es ahí donde el escritor británico Wells entra con su imaginación, preguntándole al mundo en 1958 ¿qué pasaría si los extraterrestres contaran con una tecnología superior a la nuestra?

En el año en que fue publicado el libro, la humanidad gozaba de una gran confianza en sus inventos. En las historias escritas hasta el momento, los extraterrestres perdían por el gran poderío humano. Es por ello que “La guerra de los Mundos” sacudió a los lectores, pues nadie se había atrevido a poner en duda la superioridad del hombre.

Si hoy lees este libro, tal vez te pueda parecer aburrido y exija mucho de tu imaginación, pues la tecnología de antes no se compara con la de ahora. Wells habla de caballos, carrozas, rifles, incluso de un acorazado “lanza truenos” apostado en las costas de Inglaterra y que en el libro es el arma más poderosa que existe. Muy contrario a los aviones que puedes ver en las películas sobre extraterrestres de hoy en día.

En el libro, Wells expone la fragilidad humana y la ineficiencia de las armas, sin necesidad de que los extraterrestres tengan escudos invisibles. Situando la historia en Inglaterra y esclareciendo que el ataque proviene de nuestros vecinos de marte. La información de que el mundo está siendo atacado no llega por medio televisivo, al contrario, llega por telégrafo, que era el invento más innovador del momento. 

Es una historia que vale la pena leer, primeramente porque inspiró a los grandes inventores como Robert Hutchings Goddard, a quien se le considera hoy en día pionero de la astronáutica, conocido como el “Padre de los cohetes espaciales”; segunda, por ser la primera en poner en duda el poder tecnológico de la humanidad. Esperemos que estas películas no sólo diviertan a los jóvenes, sino que también les dé alas a su imaginación.