-Inmobiliarias asustan a los empresarios que pretenden invertir en Tuxpan, al rentar locales en montos elevados, sin que sean reguladas por ninguna instancia
DE LA REDACCIÓN
Costosas rentas registran los empresarios que han decidido invertir en esta ciudad, las cuales incrementan todavía más dependiendo del giro comercial del inversionista, toda vez que si sabe que el negocio a establecerse es de cadena nacional o en apariencia de bonanza, las inmobiliarias elevan la renta hasta más del 200 por ciento.
En varios sitios se observan los letreros de arrendadoras como Habiterra, Grisma e Ikali, que son las principales inmobiliarias que operan en el Puerto, fijando montos que superan las cantidades cobradas en las grandes ciudades como Xalapa, Veracruz, Boca del Río u otras; aprovechándose de que no existe en esta ciudad alguna instancia que las regule, como la Dirección de Comercio o la PROFECO, por lo que valiéndose de la detonación turística que vive la ciudad, exageran los montos de rentas tanto de locales comerciales como de casas-habitación, sin control alguno.
Mediante un sondeo, empresarios locales y foráneos confirmaron que las rentas son mucho más elevadas que en cualquier otra parte de la entidad, mismas que quizá se podrían cubrir si hubiera suficiente circulante en la ciudad, por ejemplo el local de la calle González Ortega, donde muchos años estuvo Telecom, tiene un costo de 10 mil pesos mensuales, pero requieren hasta tres meses de depósito.
Otros que se enlistan son en avenidas principales como la Juárez, el boulevard, en Santiago de la Peña, donde manejan precios de renta por 10 mil, 11 mil y hasta 12 mil pesos, pero también cuestionan al solicitante sobre qué presupuesto tiene y qué clase de empresa es, además de que depende si se quiere el local en la planta alta o en la baja.
En pleno Centro se pueden encontrar locales ubicados en partes altas en rentas de siete mil pesos mensuales por un espacio de 4x12, otros más en 14 mil o 15 mil pesos mensuales, los cuales carecen de elevador y no son edificios nuevos, sino que la mayoría son obsoletos y no cubren los requerimientos de los inversionistas. En otros más, las rentas llegan a los 40 mil e incluso 80 mil pesos mensuales, más tres meses de depósito que exigen como requisito para poder darles el local.
Derivado de todo lo anterior, los señores opinan que no hay forma de cubrir lo que les piden y prefieren no invertir, ya que en ciudades más grandes como capitales de estado y con economía más estable los costos no son tan caros y ahí la inversión es más fácil de recuperar.
