Los goles de la victoria fueron obra de Miguel Herrera y Diego de Buen
Orbelín Pineda descontó para los Gallos Blancos, sin embargo fue insuficiente
AGENCIAS
Pachuca
La presión por sumar dos derrotas en el arranque del Clausura 2015 ameritaba y obligaba a no fallar en casa. Y apoyados por la poca eficiencia frente a la portería de los Gallos Blancos, los Tuzos registraron su primera victoria del torneo, misma que se convirtió en un respiro para el técnico, Diego Alonso.
Con dos goles precedidos de dos fallas increíbles del cuadro queretano, Pachuca se apuntó sus primeros tres puntos de la temporada, en un partido dinámico, vistoso, intenso, de llegadas en ambas porterías y que superó, por mucho, todas las expectativas.
La visita no se preocupó por dominar la pelota. Se la cedió a los de casa, que comenzaron a controlar el juego con llegadas por las bandas a velocidad, aunque con poca certeza en los centros.
Los Gallos, con poco tiempo de posición pero con más inteligencia e imaginación a la hora de atacar, generaron las dos jugadas más claras de gol. Sin embargo pagaron cara la falta de contundencia.