El DT descartó que lo correcto era que Guardado fallara a propósito
AGENCIAS
Atlanta, Georgia
“¿Qué quieren que haga?”, fue la pregunta reiterativa de Miguel Herrera, el entrenador de la Selección Mexicana que aceptó que su equipo llegó a la Final gracias al arbitraje.
Si bien se justificó al decir que el villano fue el silbante y no el Tricolor, reconoció que su equipo tuvo un pésimo partido, por el que todos en el vestidor estaban molestos.
“La verdad que no es penal, ya lo vimos en el partido, no tenemos que ir al video, qué quieren que les diga, yo no tengo culpa de eso, no jugamos nada bien, no merecíamos el partido porque no llegamos, no creamos ninguna oportunidad de gol”, expresó.
Mencionó que hay partidos que han jugado bien y no ganan pero que hoy sucedió a la inversa, por lo que en lo futbolístico deben erradicar todo lo sucedido esta noche. Pero ante los cuestionamientos tácticos tampoco tuvo respuesta.
El “Piojo” descartó que fuera correcto que Andrés Guardado fallara el penal, pues aseguró que los rivales nunca perdonan nada.
Agregó que en las discusiones los mismos mexicanos les daban la razón a los panameños en la indignación, aunque señaló que los canaleros de cualquier manera querían llevarse en ello a algún miembro del Tri. “Es el fútbol”, agregó.
Ante los cuestionamientos de una consigna en CONCACAF para ayudar al Tri, dijo que el coordinador de prensa del organismo, a su lado, podía responder dichas preguntas, aunque este último aclaró que sólo el “Piojo” hablaría en la conferencia.
Agregó que sigue creyendo en la honestidad de las personas y descartó que el camino se aclare porque Estados Unidos fue eliminado.
