26 de Septiembre de 2024

Sol de Justicia = a pobreza

 

De acuerdo a declaraciones del Delegado Regional de Patrimonio del Estado, Jesús Carballo, este asentamiento humano fue creado con apoyo del Gobierno Estatal desde hace tres años y está conformado por 430 solares en promedio; fue en marzo pasado cuando se les hizo entrega de sus escrituras, atendiendo con ello una importante demanda de vivienda, sin embargo, reconoció que de acuerdo a la hidrografía del lugar, muchas de estas familias quedaron asentadas en zonas de riesgo, ya que están muy próximas a un afluente pluvial, que lamentablemente en temporada de lluvia crece demasiado, aunado a ello, también por encontrarse en una zona baja sufren el escurrimiento de aguas de colonias ubicadas en zonas más altas.

FUENTE 1

¿Cuál es su nombre?

José Santés Pacheco

¿En qué condiciones vive don José?

En la nada prácticamente, nos prometieron servicios básicos, agua, drenaje, luz, pies de casa, accesos, puente y de eso sólo tenemos luz en nuestras chocitas, afuera todo es oscuridad, si queremos salir por alguna urgencia en la noche, debemos atravesar las “calles” llenas de “aguachales” y maleza, muchos se han caído y se han lastimado, porque no se ve nada al salir.

FUENTE 2

Señora Benita Castro Cortés

¿En qué condiciones se encuentra su casa doña Benita?

Está cercada con nailon, colchones viejos, algunos cartones, telas viejas, mi techo es de lámina, algunas de cartón y otras láminas de zinc que me regalaron algunas personas y otra parte está techada con hules; mi piso es de tierra, está húmedo cada vez que llueve porque el agua se estanca y tarda en secarse.

¿Cuántas personas viven aquí?

Ocho, mis seis hijos y nosotros sus padres.

¿Además de las carencias que hay en su vivienda, a qué otras necesidades se enfrentan?

No tenemos agua, nos trae una pipa, cuando hace sol se acerca un poco más, cuando llueve nos trae el agua sólo a la entrada y hay que ir por ella en cubetas; la ocupamos sólo para tomar porque para lavar ropa o trastes juntamos de la lluvia o vamos al arroyo por agua. No tenemos baños, hicimos unas letrinas pero con el calor, huelen muy mal, y a los niños les hace daño, sin embargo no podemos evitarlo, porque están muy cerca las letrinas, apenas se separan por unos cuatro metros de cada casa.

¿Qué riesgos corre su casa y su familia?

Vivimos con el miedo de que en temporadas de fuertes lluvias corra mucho viento y se derribe la cerca y el techo, que nos agarre dormidos; nos dijeron que nos van a construir un cuarto dormitorio y confiamos que así sea, al menos ya no dormiremos en el lodo.

¿Cómo es la alimentación diaria en su familia?

Se compone de tortilla, chile, a veces frijoles, sopas, los más chiquitos cuando alcanza, les damos leche, carne es muy difícil que la comamos, no alcanza para eso.

 

FUENTE 3

Angélica Toledo

¿A qué necesidades se enfrentan principalmente?

A la falta de agua potable, cuando el caño crece por las lluvias quedamos incomunicados y aunque venga la pipa a la entrada no podemos ir por agua, porque no podemos cruzar; nos urge un puente, cuando llueve los niños mejor no van a la escuela, ya que tienen que atravesar un puente vado y es peligroso para ellos, pues se los puede llevar la corriente.

¿De qué sobreviven?

Mi esposo es empleado, la mayoría de los que vivimos aquí son empleados de negocios, talleres, oficios, algunas mujeres trabajan en casa.

¿Cuál es su ingreso promedio?

100 pesos diarios, algunos un poco más, otros menos, pero no alcanza, vamos al día.

¿Tienen servicios de salud?

Sólo el Seguro Popular, pero cuando nos enfermamos no hay medicamentos.

¿Se enferma con frecuencia la gente que vive aquí?

Los niños principalmente, por las letrinas que huelen muy mal, a veces su piel, les salen ronchas o se les infecta algún grano. Los pisos de las casas luego se convierten en lodazales, con las lluvias y tardan en secar. Mi piso siempre está húmedo, el suelo no absorbe bien el agua.

No habrá puente, sólo alcantarilla

A decir del Director de Obras Públicas, Miguel Aizcorbi Salicrup, debido a los candados que contemplan las reglas de operación en el manejo de recursos federales, atender la demanda de construcción de un puente, trazado y pavimentación de calles para la Colonia Sol y Justicia, es prácticamente imposible, al menos en este año, puesto que ni puentes ni calles son prioridad en el Programa de Obras Públicas.

Si bien este año se recibió una participación de 75 millones de pesos, provenientes del Fondo de Infraestructura Social Municipal, únicamente el 15 % de esos recursos puede emplearse en la construcción de guarniciones, banquetas, puentes y pavimentaciones, lo cual ya está destinado para obras consideradas también de suma importancia para el desarrollo del Puerto; el resto del recurso debe ser utilizado para combatir la pobreza extrema a través de la introducción o ampliación de redes eléctricas, agua potable o drenaje.

No obstante, con recursos propios del municipio se contempla la construcción de una alcantarilla que resuelva la necesidad del puente en esta localidad, para lo cual ya se está analizando el presupuesto que se requiere y se espera poder considerarla el próximo año.

Ni agua, ni drenaje: CAEV

En cuanto a la introducción de agua potable, aun no existe ningún proyecto ni recurso etiquetado para la ampliación de la red de suministro del vital líquido a esta zona, confirmó el Ingeniero Mario Alberto Ortiz Sanabia, Jefe de la Oficina Operadora de la Comisión del Agua del Estado de Veracruz, sin embargo, dijo que de requerirlo el ayuntamiento y absorber parte de los gastos a realizar, bien podrían conjuntarse esfuerzos y en un corto plazo considerar la introducción del servicio.

Aseguró que por la ubicación de la zona, sí se cuenta con la infraestructura necesaria para poder ampliar la red de agua potable, puesto que sólo se estarían anexando algunos metros de tubería, más por el momento no hay recurso etiquetado para ello.

Aunque por otra parte, la introducción de drenaje es un proyecto prácticamente descartado por mucho tiempo, puesto que la ubicación geográfica del lugar obstaculiza el proyecto, y más todavía porque los solares son muy cercanos uno del otro, ya que sólo tienen 4.5 metros de separación; por lo que las fosas sépticas quedarían muy próximas.

SEDESOL determina prioridades

Dentro de las acciones de combate a la pobreza, la Secretaría de Desarrollo Social, ha tomado en cuenta esta localidad para la edificación de 10 cuartos dormitorios en beneficio de igual número de familias, corroboró Carlos Alberto Navarro, Director de Desarrollo Social en el Municipio, los cuales tendrán una dimensión de 4 x 5 metros; las 40 familias restantes tendrán que esperar a entrar al programa en el próximo año, ya que lamentablemente en esta ocasión sólo se autorizaron 200 cuartos dormitorios, en beneficio de 18 localidades que atraviesan por un fuerte rezago social.

Lamentablemente Sol y Justicia no es la única localidad que atraviesa carencias de servicios básicos, a ella se suman localidades como Alto Lucero, San Pedro, Las Granjas, Niños Héroes, Los Mangos, Seminario Mayor, Las Delicias, Toribio García, entre otras más, que deberán continuar en lista de espera para poder darles la solución requerida, ya que ahora corresponde a la SEDESOL, determinar a qué sitios se les debe dar mayor prioridad, con base en los censos y a resultados arrojados por las encuestas realizadas por el INEGI.

Salud expuesta, por infecciones

Mientras se atienden las carencias de servicios básicos, los habitantes de Sol y Justicia, particularmente niños y adultos mayores, tendrán que seguir expuestos a enfermedades diversas como son infecciones en la piel, cuadros diarreicos, daños en las vías respiratorias, desnutrición y cualquier otra enfermedad ocasionada por la falta de higiene, escases de alimentos, exposición a focos de infección, como son las letrinas y a los olores fétidos que éstas desprenden, incluso por el contacto con aguas negras o estancadas.

En este sentido, el Doctor Francisco Arango Graña, Jefe de la Jurisdicción Sanitaria Número II, dijo desconocer la existencia de pacientes con padecimientos como los anteriormente mencionados, provenientes de esta localidad; sin embargo, agregó que en caso de requerirlo la localidad, pueden contribuir con brigadas sanitarias e incluso asesorarles en la construcción de sus letrinas, para ir acabando con esos focos de infección y reducir riesgos sanitarios.

Esta información, dijo, se les da a las amas de casa a través de los talleres que imparten como parte del programa PROSPERA, sin embargo, la falta de cultura y conciencia sobre los daños que genera el uso de letrinas mal diseñadas, el consumo de agua no esterilizada, así como el bañarse, lavar trastes o ropa con agua de una zanja en la que descargan aguas residuales, hace que la población exponga su salud de manera innecesaria.

LA CRÓNICA

 

¿Y ustedes qué apoyo nos traen?, ¿De qué partido son?, ¿De dónde vienen?... De ningún partido señora, buenas tardes, ¿cómo está?, venimos de Diario de Tuxpan, ¿podría regalarnos unos minutos para platicar con usted sobre las condiciones en las que vive su familia y la localidad?, trabajamos en un reportaje sobre el grado de pobreza que hay en la…. No, no les voy a decir nada, sólo si vamos a mi casa para que vean como vivo, aquí con la vecina no, porque los apoyos nada más los traen con quien quieren, no a quien le hace falta, yo voy a juntas, voy a reuniones, a las campañas y a mí nunca me toca nada, ¿Qué traen ustedes?, ¿Qué van a dar? ¿Qué quieren de nosotros?... No traemos nada señora, mi compañero Juanito y yo venimos sólo a platicar con ustedes, conocer sus necesidades y reflejarlas a través de nuestro periódico para recordar a las autoridades que siguen presentes, que no los olviden…, lo que hacen no me parece justo, para que van a construir cuartos, lo que van a gastar en esos cuartos que sólo son para sus preferidos, deberían ocuparlo para comprar láminas y repartirlas entre todos, a todos nos hace falta, nuestros techos se están cayendo, ahora que vengan los huracanes nos vamos a quedar si casa, y como siempre la ayuda sólo llega para unos, no para todos, de que sirve que vayamos a los mítines, nos prometen todo, votamos por ellos y nunca llega nada, nos visitan sólo en campaña, nunca regresan, no tenemos ni agua para beber, no tengo nada que decir… y se fue. Así fue nuestro encuentro con una de nuestras entrevistadas, no tenía nada que decir, pero en realidad dijo mucho, un reflejo más del sentir de las familias más vulnerables de la zona, cansados de promesas, cansados de no ganar ni para comer, de no tener ni siquiera para levantar un lugar decente donde vivir, expuestos a padecer inmensos fríos o calores extremos, y molestos de ser utilizados sólo de bandera política y olvidados una vez obtenido el triunfo.